Llamando, ojalá muchos me contesten,
Bienvenido al club de los que sienten
Llamando, vente a vivir al presente
bienvenido al club bueno y sincero

A todo ser viviente consciente de su existencia
Y a todo ser que sepa utilizar bien la razón.
Llamo a todo ser humano, a todos mis hermanos
que piensen, hablen y hacen con la mejor intención
A los que no critican, ni actúan para pinchar,
A los que eligen felicidad y no conflicto
Llamo a la persona humana que sea autentica
Y que no esté dirigida por los ideales políticos
No contaminada por nada que no sea el ahora
no prediseñada por la moda de la nueva ola
a los que conocen los besos cómplices
y todos los poderes de las miradas dóciles.
Que amen las miles de formas expresadas
Y conozcan los efectos de saber perdonar
Que tiene la fuerza para afrontar la desgracia
Y la valentía de seguir aunque todo vaya mal

Llamando, ojalá muchos me contesten,
Bienvenido al club de los que sienten
Llamando, vente a vivir al presente
bienvenido al club bueno y sincero

A los que recargan energía con la luz del día
A los que no abusan ni humillan, ni castigan ni obligan
Aprecian la belleza de palabras y melodías
Y saben cómo flotar en atmosferas frías y vacías.
Tiene osadía frente el enemigo humildad ante amigos
Hablan en silencio y son los testigos
A los que no dicen que no son vanidosos, porque eso es de vanidosos.
Y por fin lo ha aprendido.
A los que no vencen, y no dejan de luchar
Contra el cáncer, depresión o cualquier maldad
bienvenido o bienvenida , a este club de buena vida
bienvenido al misterio silencio de la mente
Llamado a todos los que creen en su divinidad
Sabe que dentro es donde está su total
bienvenido o bienvenida , a este club de buena vida
bienevenidos al club de los sienten

Llamando, ojalá muchos me contesten,
Bienvenido al club de los que sienten
Llamando, vente a vivir al presente
bienvenido al club bueno y sincero

A todos los que sintonizan con la voz interior
Que dice que todo está bien y podría ser peor
A todos los que agradecen lo poco que tienen por que
Saben que otros mueren por sed o desnutrición.
A los que no levantan la voz, y son amables,
Da gusto hablarles porque te llenan de alegría
En fin, llamo a todo aquel, consciente de su ser,
De su espíritu, de su alma, o de su energía